martes, 19 de noviembre de 2013

ANTE EL HORIZONTE

Ante todo "Ante el horizonte" es una exposición sobre el anacronismo. No es que el hecho del horizonte tenga una relevancia máxima e insustituible, podría haber tratado la representación de tomates a lo largo de la historia del arte y hubiera habido el mismo anacronismo, si el anacronismo es el punctum de todo. 
La exposición es una reunión de horizontes pintados y fotografiados, esculpidos e instalados, dónde el título remite al libro "Ante el tiempo" de Huberman sobre el anacronismo en la H.A. Todo adornado con frases de grandes como Walter Benjamin, Carl Einstein y Aby Warburg en lo alto de las paredes, que si uno no se fija bien, pueden pasar desapercibidas perfectamente. No obstante, el tríptico reza que la exposición gira entorno a la representación del horizonte como tema recurrente y gran desafío pictórico, y se estructura mediante una secuencia de conversaciones y diálogos anacrónicos que tratan diversos aspectos del horizonte representado.

El punto de partida es una sala introductoria dedicada a Joan Miró, allí se encuentran 3 piezas de las más importantes de la exposición, es decir, un fantástico paisaje realista de Modest Urgell, una representación de la visión de éste por el propio Miró y un horizonte dorado que se remonta y se duplica del artista Perejaume.



Posteriormente se pasa por salas donde se introducen obras francesas, japonesas, y por último americanas. Destacan obras como los neones minimalistas y puros de Dan Flavin, las fotografías del paisaje americano de Ansel Adams.



La cereza del pastel es sin duda un increíble Magritte que muestra el mejor de los horizontes posibles, el onírico, el platónico, el ideal de los sueños donde todo es posible y toda meta es alcanzable. ¿De qué material están hechos los sueños? ¿Qué es  un horizonte sino un final a culminar, una cumbre que escalar, un objetivo que alcanzar? El horizonte es la bastedad sublime de las posibilidades del ser humano. En el fondo no es una contemplación estática. No hay paz hasta no conseguir contemplarlo de manera serena.





N.A: agradecer al personal de la Fundación Miró, a personal de sala y taquilla (trabajadores fantásticos de Ciut'art, muchos compañeros de carrera) y a jefe de grupo de personal David Baezas, el estupendo trato y ventajas que siempre me dan debido a su profesionalidad. 

Fundación Miró.
Comisariada por Martina Millà, patrocinada por F.BBVVA.
Del 24 de octubre al 16 de febrero de 2o14

"Ars longa, vita brevis"

viernes, 8 de noviembre de 2013

EL CAMINANTE CONTEMPORÁNEO

Hay instantes que son punctums en un simple paseo al atardecer. 

C.D.Friedrich, El caminante sobre el mar de nubes. 1818. Foto de autora. El caminante contemporáneo. 2013

Existen muchos conceptos que se podrían unir a este collage de fotografías de una forma más o menos adecuada: la idea de lo Sublime, la superioridad de la naturaleza frente al hombre, la conquista del superhombre frente a sí mismo, el inmediatismo del hecho artístico, y (el que se va a comentar) la casualidad del momento en la mezcla de lo moderno con lo contemporáneo o actual en la relatividad del tiempo.


Apasiona en el arte el instante casual -lo de casual es de suma importancia- que se presenta en una situación normal y que de repente golpea la memoria. Se es imagen, se piensa en imágenes, se recuerdan más imágenes que palabras y más cosas que se ven que de las que se leen o escuchan. Se es iconográfico diría E.Panofsky, y tendría razón. Se remarca el hecho de la casualidad porque esta imagen no es una creación artística sino una memoria artística. 

Otro de los conceptos que apasiona en el arte es la carencia de la importancia del tiempo verse a la acción, e incluso, a veces, verse al mensaje. No importa que entre las imágenes que se muestran arriba hayan pasado 195 años de la una a la otra, siguen teniendo la misma esencia. Siguen podiendo reconocerse. Ese "algo" sigue respirándose en el aire. Se podría dar un discurso similar entre ambas adecuado al tiempo actual. Adecuado al tiempo actual porque si se pudiera decir exactamente las mismas razones se estaría estancado en la Historia del ser humano, y eso no debe ser así obviamente, han ocurrido hechos y han evolucionado conceptos de un tiempo atrás al presente que afectan a ambas imágenes. No se hablaría hoy Romanticamente de la inmensidad del universo, del acercamiento a Dios a través de la naturaleza, de la visión de la vida eterna en la cumbre de la soledad del individuo, etc -o quizás sí- sino puede que se cuestionara el existencionalismo del ser de otra manera fundamentado en otros hechos, no obstante, el acto sigue siendo el mismo. ¿A caso la sopa Warhol después de 50 años no sigue teniendo el mismo sentido? El tiempo pasa el mensaje perdura. 


Todo lo que conocemos lo hemos aprendido y recordado a través de imágenes (mucho antes de que existiera la escritura) y textos de todas las ramas del arte, todos los actos y los pensamientos han quedado reflejados en el arte.
La visión de la vida -de todas las vidas, de todas las épocas- a través de como la muestra el Arte es algo constante en el transcurso de la Historia que afecta al ser humano de forma trascendental, docente, pura y mágica. Hoy, y como siempre, la vida es corta, el Arte es eterno.


"Ars longa, vita brevis"